4 de febrero de 2014

Tormenta pinta de blanco a Nueva York y se esperan dos tormentas esta semana

Nueva York — La nieve parece decidida a no conceder respiro a los neoyorquinos. La tercera gran tormenta invernal en lo que llevamos de año azotó ayer a la ciudad y para esta misma semana se esperan otras dos fuertes nevadas, según anunció el alcalde Bill de Blasio.

Sin que haya habido apenas tiempo para limpiar las alrededor de ocho pulgadas de nieve que cayeron ayer, las previsiones apuntan a que comenzará a nevar de nuevo esta noche y no parará hasta el miércoles por la mañana. Otra potencial tormenta podría llegar para el fin de semana, poniendo al límite la paciencia de los ciudadanos.

"Llevo aquí 10 años y es el peor invierno que recuerdo", dijo el ecuatoriano Osvaldo Martínez (45). "Es como si te dieran una golpiza y antes de que te levantes del suelo, te golpean otra vez. Esta semana si pudiese no saldría de casa".

De Blasio pidió expresamente a los neoyorquinos que utilicen al máximo esta semana eltransporte público y eviten sacar sus coches para que se pueda limpiar lo antes posible la nieve de las calles.

El alcalde admitió en conferencia de prensa que la respuesta municipal ante la gran nevada del pasado 21 de enero "había dejado que desear", y que por ello se habían tomado nuevas medidas para esta ocasión. 

Entre ellas, se decidió suspender los servicios de recogida de basuras y reciclaje con suficiente antelación para que todos los recursos del Departamento de Sanidad fueran redirigidos a la limpieza de la nieve y al esparcimiento de sal.


Se hicieron esfuerzos asimismo para que se coordinen mejor las agencias municipales. Por ejemplo, las cámaras de seguridad de NYPD estuvieron a disposición de los servicios de recogida para conocer qué áreas necesitan más atención.

"No espero que los neoyorquinos sean pacientes, eso no está en su naturaleza, pero tienen que entender que nuestra prioridad es la limpieza de las carreteras y calles primarias", dijo De Blasio. "De ellas dependen el acceso a los hospitales y a los servicios más importantes".


Las escuelas permanecieron abiertas de nuevo ayer —solo se cerraron durante la primera gran nevada del 2 de enero— lo que enfureció a algunos padres.

"Sacar a los niños hoy (por ayer) a la calle es un peligro. No se ve ni por dónde caminas", se quejó la dominicana Guillermina Rosa (39). "He llevado a mis dos hijas a la escuela esta mañana porque no quiero que pierdan clase, pero deberían pensar un poco más en los niños, que son los más vulnerables. Esto es inhumano".


Los centros de ancianos cerraron después del mediodía. Las regulaciones de estacionamiento alterno también fueron canceladas y continuarán suspendidas hoy.


El alcalde añadió que si la tormenta hubiese llegado durante la celebración de la Super Bowl el caos podría haber sido enorme. Con todos, los fanáticos que regresaban a sus lugares de origen se vieron afectados por el casi un millar de cancelaciones que se produjeron en los vuelos de los principales aeropuertos.

No hay comentarios: