Soy residente norteamericano y agradezco a ese país, pero mi pasaporte es dominicano. Ese es mi orgullo de siempre”, dijo el expelotero.
La sonrisa de Sammy Sosa se expande por diversos puntos del globo terráqueo. Toca en sus residencias en la República Dominicana y Miami, cruza por la costa oeste de los Estados Unidos, donde sus primeros cuatro vástagos se educan, o los otros lugares donde se maneja entre negocios y placer.
Así es el mundo de Sosa, el otrora jardinero de los Cachorros de Chicago, hoy empresario que es padre de seis hijos.
“Tenemos una empresa de construcción que se llama Riverhead Homes y ahora mismo tenemos un proyecto grande en Panamá con Riverhead Managment”, dice Sosa a elCaribe. La compañía construye más de 1,700 edificaciones (casas y apartamentos de tres y cuatro niveles) en la zona de Tocumen, un distrito al este de la zona metropolitana donde queda el aeropuerto más importante del país, según Wikipedia.
“Si Dios lo permite espero también hacer un proyecto de ese tipo aquí en el país. Esperaremos a que pasen las elecciones para meternos de lleno”, agrega.
“Dentro de las mejores economías en el área están Panamá y República Dominicana. Aquí estamos bien y eso es una buena señal para atraer inversión”, expone con un dominio evidente.
La familia
Sammy lleva 24 años de casado con su esposa Sonia, con quien ha procreado seis hijos.
“Tengo a Keisha y Kenia (mellizas), Sammy Jr., Michael, Kalesi y Rolando Antonio, que son los más pequeños. Tenemos tres y tres (hembras y varones). De los primeros cuatro, hay tres en la universidad y una terminó”, dice. Los retoños de Sosa estudian música, arte, cine, fotografía e ingeniería en sonido.
Proclama que la mejor herencia que le puede dejar a sus hijos, que se preparan en universidades en el estado de California, “es su educación. Desde que Michael termine su secundaria va para la universidad. Ahora me divierto con los pequeños. Son un amor”.
Sammy espera inyectarle a Rolando Antonio pasión por el béisbol. “Ya lo he puesto a hacer swing”, dice entre risas. Y los elogios a Sonia no se quedan. “Soy bendecido de tener una tremenda esposa, me siento orgulloso de tener un tronco de mujer al lado mío. Es una mujer encantadora y detrás de cada hombre de éxito hay una gran mujer”.
Nota de Jansen Pujols
Via elcaribe
La sonrisa de Sammy Sosa se expande por diversos puntos del globo terráqueo. Toca en sus residencias en la República Dominicana y Miami, cruza por la costa oeste de los Estados Unidos, donde sus primeros cuatro vástagos se educan, o los otros lugares donde se maneja entre negocios y placer.
Así es el mundo de Sosa, el otrora jardinero de los Cachorros de Chicago, hoy empresario que es padre de seis hijos.
“Tenemos una empresa de construcción que se llama Riverhead Homes y ahora mismo tenemos un proyecto grande en Panamá con Riverhead Managment”, dice Sosa a elCaribe. La compañía construye más de 1,700 edificaciones (casas y apartamentos de tres y cuatro niveles) en la zona de Tocumen, un distrito al este de la zona metropolitana donde queda el aeropuerto más importante del país, según Wikipedia.
“Si Dios lo permite espero también hacer un proyecto de ese tipo aquí en el país. Esperaremos a que pasen las elecciones para meternos de lleno”, agrega.
“Dentro de las mejores economías en el área están Panamá y República Dominicana. Aquí estamos bien y eso es una buena señal para atraer inversión”, expone con un dominio evidente.
La familia
Sammy lleva 24 años de casado con su esposa Sonia, con quien ha procreado seis hijos.
“Tengo a Keisha y Kenia (mellizas), Sammy Jr., Michael, Kalesi y Rolando Antonio, que son los más pequeños. Tenemos tres y tres (hembras y varones). De los primeros cuatro, hay tres en la universidad y una terminó”, dice. Los retoños de Sosa estudian música, arte, cine, fotografía e ingeniería en sonido.
Proclama que la mejor herencia que le puede dejar a sus hijos, que se preparan en universidades en el estado de California, “es su educación. Desde que Michael termine su secundaria va para la universidad. Ahora me divierto con los pequeños. Son un amor”.
Sammy espera inyectarle a Rolando Antonio pasión por el béisbol. “Ya lo he puesto a hacer swing”, dice entre risas. Y los elogios a Sonia no se quedan. “Soy bendecido de tener una tremenda esposa, me siento orgulloso de tener un tronco de mujer al lado mío. Es una mujer encantadora y detrás de cada hombre de éxito hay una gran mujer”.
Nota de Jansen Pujols
Via elcaribe
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