Entre llantos, canciones, baile, alcohol y enfrentamiento entre policías y cientos de seguidores de Monkey Black, fueron sepultados la tarde de este domingo los restos del reguetonero dominicano en el cementerio Cristo Salvador, Santo Domingo Este.
“Soy latin king, soy ñeta y trinitario, va a correr sangre en España”, afirmó Papañejo, quien era ovacionado por cientos de seguidores de Monkey Black alrededor del nicho donde fue sepultado el intérprete de música urbana.
“Queremos a los gitanos, muerte a los gitanos. Dios bendiga todos los que me han apoyado”, expresó y luego los gritos de todos los presentes pidiendo justicia invadieron el camposanto.
En tanto, Santiago Matías (Alofoke), dijo “en nombre de la familia agradecemos que hayan venido a despedir a un guerrero de la calle y de la vida que ha dejado un legado en la música. Un joven que ha venido de un barrio sin oportunidades, pero su talento le abrió muchas puertas y miles de corazones. Esperamos que esté con Dios”.
Indicó además, que Monkey Black tiene un legado musical que no puede ser olvidado. “Así que vamos todos a recordar a este joven con mucho cariño, amor y con su música”.
Pidió un aplauso para reguetonero, mientras los presentes decían: “Monkey, Monkey, Monkey”.
Tributo
Los familiares, amigos y seguidores del autor del tema “El sol y la playa” rindieron un tributo al cantante a la altura de un líder popular montados en las capotas de los vehículos y siguieron el cortejo fúnebre por toda la carretera Mella hasta llegar al cementerio.
El cadáver de Monkey Black fue sacado a las 2:00 de la tarde del Club Los Mina, donde la mañana de hoy varios reguetoneros, entre ellos el Lápiz, Joa y Químico, rindieron homenaje.
Los artistas y familiares vistieron camisetas con la foto del cantante y le dejaban una gorra dentro del féretro en señal del aprecio que le tienen al “Mega Divo”.
Cientos de vehículos bicicletas y motores con bocinas a todo volumen con las canciones de Monkey Black y un contingente policial que custodiaba el recorrido anunciaron la llegada de la comitiva fúnebre al camposanto.
Enfrentamiento
Un enfrentamiento a tiros y bombas lacrimógenas se produjo entre policías y cientos de seguidores del Monkey Black que intentaban entrar con motocicletas al cementerio Cristo Salvador.
El incidente, donde no hubo heridos, se produjo cuando los agentes del orden querían impedir que los motoristas que venían tras el carro fúnebre con el féretro de Monkey Black entraran al camposanto, pero no tuvieron éxito, ya que finalmente todos lograron entrar al cementerio.
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