Guardias de una prisión en Brasil, en el estado de Alagoas, dicen que frustraron un plan de fuga con un cómplice inesperado: un gato blanco y negro.
El gato tenía un celular, brocas, baterías y dos sierras pegadas con cinta a su cuerpo cuando fue visto por los guardias el 31 de diciembre cuando estaba a punto de entrar a la prisión en Arapiraca, según dice un comunicado del gobierno del estado de Alagoas.
Autoridades de la prisión aseguran que los elementos pegados al gato iban a ser usados para un escape.
Los más de 250 reclusos fueron considerados sospechosos mientras que los funcionarios dijeron que no conocen por lo pronto quién estaría usando el gato.
El incidente está bajo investigación, y el gato fue entregado a control de animales, dice el comunicado.
Fuente/CNN en Espanol
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