Vladimir Guerrero Jr. estaba determinado a no reportar a otro campamento de primavera de los Blue Jays con más peso del que quería.
Avergonzado y arrepentido tras llegar fuera de forma al campamento de verano en 2020, el toletero dominicano trabajó agresivamente en su acondicionamiento físico en el receso de temporada y dijo que perdió 42 libras desde julio pasado.
“Vine al campamento de primavera fuera de forma por un par de años”, dijo Guerrero a través de un traductor en el campamento de los Blue Jays en Dunedin, Florida. “Un día, en mi casa en República Dominicana, me senté y pensé en todo esto. Decidí entonces que iba a estar listo, que me iba a preparar, que iba a trabajar muy duro para este año.
“Lo hice, porque mi enfoque principal es sólo estar listo y ayudar al equipo a ganar”, agregó.
Un Guerrero más delgado dijo que se siente más fuerte, más veloz y más determinado.
“Trabajé muy duro en mis piernas, porque realmente quería confiar en ellas. Antes, no llegaba a las rolas. A veces, en el plato, no podía aguantar a la llegada de la pelota”, dijo el pelotero dominicano. “Me siento más rápido en todos los aspectos. Me siento grandioso al correr las bases. Antes, sentía mucha fatiga luego de tomar rolas. Ahora, puedo atrapar 50, 60 rolas y sentirme bien”.
El manager Charlie Montoyo elogió a Guerrero por su transformación.
“Cumplió sus metas. Tuvo un gran receso de temporada. Todo su trabajo dio resultados. Realmente luce bien”, destacó el manager.
Guerrero, quien cumple 22 años en marzo, bateó para .272 con 15 jonrones y 69 carreras remolcadas como novato en 2019, pero conectó su último cuadrangular el 16 de agosto y lució cansado el resto de la temporada, mientras perdió juegos por una dolencia en la rodilla derecha.
Guerrero perdió peso antes del campamento de primavera en 2020, pero lo recuperó luego de que la pandemia por el COVID-19 pusiera en pausa al beisbol por varios meses. En noviembre pasado, el dominicano dijo a un periódico de su país que se había disculpado con sus compañeros de los Blue Jays tras reportar con sobrepeso en el campamento de verano, cuando las Grandes Ligas reanudaron su campaña.
“El último par de años, sabían que venía fuera de forma. No me preparé muy bien y sentí en ese momento que mis compañeros necesitaban mi disculpa”, relató Guerrero.
Tras cambiar de tercera a primera base en 2020, Guerrero bateó para .262 con nueve cuadrangulares y 33 remolcadas al participar en los 60 juegos de la temporada abreviada por la pandemia.
Montoyo señaló que, junto con el gerente general Ross Atkins, habló con Guerrero y le dijeron que se concentrara en sus esfuerzos por mejorar en primera base.
“Mi primera base es Vlad guerrero y mi tercera es Biggio, pero si enfrentamos a un zurdo poderoso o algo así y busco darle a Biggio un día libre, entonces Vladdy podría ir a la tercera”, señaló el piloto.
“Nuestro principal mensaje fue, ‘conviértete en un primera base de Guante de Oro y luego te moveremos a la tercera y veremos qué pasa”, finalizó Montoyo.
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