La justicia de Estados Unidos exculpó a la firma automotriz Porsche por el accidente donde el actor Paul Walker murió el 30 de junio del 2013.
El juez federal de Los Ángeles, Philip S. Gutiérrez, desestimó la demanda realizada por la viuda de Roger Rodas, amigo del protagonista de "Rápido y Furioso" y conductor del auto en el fatídico hecho.
Según la publicación de TMZ, su alegato consistió en que el Porsche Carrera GT presentaba una serie de desperfectos de seguridad y de fábrica que resultaron claves en el accidente.
Además, en su escrito expuso que el vehículo manejado por Rodas se trasladaba a88 kilómetros por hora, siendo que el informe policial determinó que el vehículo iba a una velocidad entre 128 y 150 km/h.
Tras esta desestimación, ahora sólo queda pendiente la demanda similar presentada en septiembre del año pasado por Meadow Walker, la hija del malogrado actor.
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