Los manifestantes cesaron en su lucha luego de sostener un encuentro con una comisión de la Autoridad Portuaria Dominicana que acudió al lugar.
Antes de abandonar la Iglesia, los protestantes realizaron un inventario de todos los equipos y mobiliarios del templo bajo la supervisión del sacerdote Juan José Zaro, quien había cedido el lugar para la protesta que inició el pasado miércoles 20.
Los protestantes se habían ubicado en el lugar del templo destinado para los músicos y el coro parroquial. Disponían de un solo baño para realizar sus necesidades fisiológicas. Familiares y amigos les entregaban raciones alimenticias y eran custodiados por efectivos policiales.
Una comisión de los afectados se reunirá este martes a las 10 de la mañana en la sede de la Autoridad Portuaria Dominicana para discutir sobre las prestaciones adeudadas.
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