En el encuentro definitivo, Boston contó con la estabilidad en el pitcheo de John Lackey, y con la aportación ofensiva para producir carreras de Shane Victorino (un total de 4), el hombre que con un grand slam en la Serie de Campeonato de la Liga Americana llevó a su equipo a la Serie Mundial.
En la parta baja de la tercera entrada, Victorino pegó el batazo clave, que llevó a la caja registradora a Jacoby Ellsbury, David Ortiz y Jonny Gomes. Las tres carreras marcaron el rumbo definitivo del partido. Mike Napoli y Stephen Drew (con un cuadrangular en la cuarta entrada) también remolcaron carreras.
Los Cardenales descontaron en la séptima entrada, con un imparable de Carlos Beltrán que llevó a home a Daniel Descalso.
Tuvieron que pasar casi 100 años, desde la época de Babe Ruth -una leyenda del beisbol-, pero de nueva cuenta el Fenway Park volvió a ser el escenario en que los Medias Rojas conquistaron el Clásico de Otoño, ante su afición -la última vez había sido en 1918.
En ese entonces su campo era conocido como Yawkey Way, y en él vencieron 2-1 a los Cachorros en el sexto juego, para ganar la Serie Mundial, recordó EFE.
Aquella vez le correspondió a Ruth subir a la lomita en la octava entrada, y contribuyó para que Medias Rojas alcanzara la gloria deportiva.
En los seis partidos de la serie 2013 ante los Cardenales, los Medias Rojas contaron con el liderazgo y talento ofensivo del dominicano David Ortiz, que bateó en los momentos decisivos. Por esa razón se quedó con el título de Jugador Más Valioso de la serie. El título de Boston se da después de que en la temporada pasada tuvieran un mal desempeño, que los ubicó en el último lugar de las Grandes Ligas.
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