Casellas, de 37 años de edad, fue condenado a entre 5 a 6 años en el 2012, luego de cuya sentencia, fue repatriado, pero se las arregló y volvió a Estados Unidos, seis meses después, siendo apresado nuevamente y repatriado por segunda ocasión.
Tuvo suerte, al ser una de las víctimas de manipulación de pruebas en un laboratorio de drogas del estado de New Hamsphire, de cuya acción se acusó a la funcionaria Annie Dookhan, con cuya acción puso en riesgo cientos de condenas a narcotraficantes en Nueva Inglaterra.
Por esa razón, Casellas, fue liberado antes de tiempo, pero aprovechó su libertad para continuar enrolándose en el tráfico de heroína de cuya droga, movió cientos de libras en el área.
Operaba desde Lawrence (Massachusetts), manteniendo un punto en un edificio situado en un sector residencial. En el 2014, se le detuvo nuevamente por una infracción de tránsito, pero por un error de la Policía Estatal, fue liberado sin cargos, lo que le permitió seguir en el negocio sucio de las drogas.
Casellas no despertó sospechas, incluso cuando fue atrapado por exceso de velocidad en junio del 2014, menos de un año después de haber sido deportado.
La Policía Estatal detuvo a Casellas en la calle Water conduciendo un Nissan Altima y lo acusó de exceso de velocidad, y manejar sin licencia, dando un nombre falso, y con licencia con el nombre de otra persona.
Sus huellas dactilares fueron enviadas electrónicamente al FBI y al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas para una verificación de antecedentes.
Al día siguiente, los funcionarios de la policía migratoria, dijeron que en su base de datos apareció Casellas como el criminal que había sido deportado el año anterior y no debería haber estado en el país de nuevo.
Pero para entonces, Casellas se había ido. El no se presentó para una lectura de cargos y los “intentos de localizarlo después de su liberación no tuvieron éxito", dijo el vocero de la policía migratoria Khaalid Wall.
A finales de junio, justo una semana antes de cumplir dos años en las calles, la policía consiguió una pista sobre una empresa "importante" que procesaba heroína y Casellas fue arrestado.
Las autoridades describieron a Casellas, como un distribuidor importante de la droga, cuya operación había extendido a través de Nueva Inglaterra.
Casellas fue arrestado por primera vez en Lawrence en el 2009. En esa detención, le incautaron 6,5 gramos de heroína con un valor estimado de $650 y más de $2.000 en efectivo. Fue apresado junto a Luis Nieves y Jeannette Hardy.
A ambos hombres se les impuso una fianza de $20.000 en efectivo, que más tarde pagó Casellas.
Tres meses más tarde, mientras la policía de Lawrence estaba investigando un robo con allanamiento de morada en la calle Avon, los oficiales observaron la heroína y la cocaína visible durante una "batida de protección" en un apartamento del tercer piso.
Casellas, que apareció mientras la policía se encontraba en el apartamento, fue arrestado y se declaró culpable en el 2010, siendo condenado entre cinco a seis años tras las rejas.
Pero la buena fortuna de Casellas terminó a finales del mes pasado, luego de un atraco con allanamiento de morada en Manchester, (New Hampshire).
Las drogas fueron encontradas en la casa de la víctima, y acordaron trabajar con la policía que, en cuestión de días, tenían a Casellas en la mira.
Nota de Miguel Cruz Tejada
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