La cantante de ópera se lució al presentarse junto al bachatero Raulín Rodríguez y entre ambos lograr el segmento más comentado de esa noche.
Por Cristina Liriano.- Ella debutó siendo Zerlina en la ópera “Don Giovanni” de W. A. Mozart en el teatro vienés Schlosstheater Schönbrunn.
Logró con su trabajo fuera del país importantes reconocimientos y presentarse en los teatros más importantes de Austria, pero fue la bachata “Esta noche” la que descorrió el velo a la cantante lírica Nathalie Peña-Comas para que en su país la conocieran al cantar en el premio Soberano hace unos días en el Teatro Nacional.
Hoy, pasando balance a todo lo que sucedió esa noche, Nathalie dice que su vida ha cambiado, porque son muchos los comentarios y felicitaciones que le han hecho llegar, muchos de ellos de gente que generalmente no escucha bachata. Revela que ella y Raulín conectaron desde la primera noche.
“Cuando Raulín escuchó la parte de su bachata cantada por mí la primera vez, a él se le aguaron los ojos y me dijo que yo tenía que grabar ese tema netamente lírico, porque mi interpretación lo había dejado impactado”, contó al ser entrevistada en la redacción del periódico EL DÍA.
El encuentro
“Nosotros no nos conocíamos anteriormente, tuvimos una plática, conversamos, hablamos de nuestras carreras y me sentí identificada con su vida y su trayectoria.
Eso fue lo que rompió el hielo entre nosotros, un músico empírico con un talento innato, yo con un talento innato, pero estudiado y trabajado en universidades especializadas, nos veíamos unidos por el mismo lenguaje de la música, fue algo impresionante”, cuenta la artista.
Con su residencia en Austria se va el viernes para presentar un concierto de ópera, Nathalie dice que está contenta con todos los seguidores que no escuchaban su música y ahora son más que sus fanáticos.
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