Chóferes y la Asociación Nacional de Detallistas de Gasolinas (Anadegas) calificaron este sábado como “abusivo, criminal y desproporcionados” los aumentos que aplicó el Ministerio de Industria y Comercio a todos los combustibles.
Arsenio Quevedo, Juan Marte, Alfredo Pulinario Linares y Rafael Polanco, indicaron que aumentar más de cuatro pesos a las gasolinas y al gasoil, así como tres pesos al GLP, conlleva a que los transportistas se reúnan urgente para tomar decisiones que podrían ser dolorosas para la población.
Quevedo, de la Unión Nacional de Transportistas y Afines (Unatrafin), definió como “una consideración a la población el incremento a los carburantes, porque no existen razones valederas para aplicar esos reajustes tan desproporcionados”.
Solicitó al ministro de Industria y Comercio, José del Castillo Saviñón, una reunión urgente para que les explique a los transportistas en sentido general las razones de los aumentos. “Desde hoy estaremos en sesión permanente ante este golpeo al sector transporte”, dijo.
Juan Marte, de la Central Nacional de Trabajadores del Transporte (CNTT), subrayó que “los aumentos ponen en peligro el servicio del transporte en Santiago de los Caballeros, cuyas unidades del concho se sustentan con el subsidio de la tarjeta de Bonogas”.
Apuntó que en Santiago sólo el 40% de los choferes tienen ese documento, a pesar de que el Gobierno eroga mensualmente 58 millones para el pago del subsidio bonogás.
Señaló que los incrementos en los derivados del petróleo contribuirán a que mil 300 carros de concho en Santiago, y otros 4 mil 800 taxistas que usan GLP paralicen sus unidades.
“Esta es una medida criminal, que no sólo atenta contra los transportistas sino contra los usuarios que pagan 20 pesos la tarifa”, expresó Marte.
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