La fiesta blanca se inició a las 8:00 de la noche, con la animación del presentador Jhoel López y pasadas las 9:00 fue llamado a tarima Vakeró para que iniciara la descarga musical a ritmo urbano.
El intérprete inició su presentación con “Ay, mami”, que trajo muchas sorpresas, las que fueron disfrutadas por el público presente (más de 2,000 personas).
Vakeró demostró que está en otra etapa de su carrera, en que las sensuales bailarinas ya sobran, y por eso se le vio acompañado de sus músicos y dos coristas masculinos que lucían atuendos elegantes (poco usual en este género).
La noche se prestó, además, para que entre tema y tema el artista agradeciera a Brahma Light, patrocinador del evento, que le supliera con varias cervezas mientras cantaba.
Vakeró demostró que no solo rapea, sino que también es capaz de hacer temas tan románticos que le recordaron el amor que, al parecer, siente por la cantante Martha Heredia, de quién siempre se ha especulado, pero que ninguno de los dos había admitido públicamente.
Además bailó y cantó bachata. Una joven del público subió a tarima para bailar con el artista y él le correspondió con unos pasitos de bachata, mientras interpretaba uno de los temas de su bachatero preferido según ha dicho, Marino Pérez.
La noche del sábado, en la explanada donde se llevó a cabo el show inaugural del espectáculo, la gente pedía con fuertes gritos que interpretara el tema que suena en la radio y se ha convertido en un hit: “Échale agua”.
Aunque se pensaba que el tema que el público esperaba la noche del sábado era “Qué mujer tan chula”, no fue así. Sin embargo, Vakeró, inteligentemente, lo dejó para el final.
Antes, subió a Martha Heredia, tal y como el público lo pidió, para revivir una historia de amor de la que mucho se ha hablado, pero que hasta esa noche ninguno de los dos se atrevía a asumir públicamente.
“Matha, Martha, Martha”, decía el público y ella lo complació. Luego de saludar con su ya conocido “hola, baby”, la ganadora del Latin American Idol pidió que soltaran la música porque estaba dispuesta a cantar. Fue así que ambos se juntaron en escena para interpretar un tema que, de alguna manera, reflejaba lo que viven estos dos jóvenes artistas.
“Tú eres mío, mío tú serás, por nada del mundo te dejaré de amar”, decía el estribillo que ambos corearon, mirándose a los ojos, olvidándose de los demás ojos que los miraban enfrente.
Un gran beso selló la participación de la “Baby” que movilizó a los presentes y los hizo levantarse de sus asientos a presenciar esta tierna historia de amor propia de una telenovela.
De inmediato, las redes se activaron y surgieron comentarios distintos, unos apoyando lo que habían visto y otros desaprobando la actuación de la joven artista.
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