María Altagracia Ávalos, de 23 años, murió de 13 puñaladas que le infirió la menor Carina Lara, de 16, en el colmadón Arcoiris, de la calle Santomé, lugar que, según el legislador, es reincidente en admitir menores que allí consumen bebidas alcohólicas y drogas.
Ayer, el tío de Ávalos, Zacarías Díaz Peguero mató a tiros a la menor homicida cuando la Policía la llevó a su residencia a buscar la “sevillana” con la cual provocó la muerte a Ávalos, mientras peleaban en el colmadón. Los agentes a su vez mataron al hombre.
Según los familiares de Díaz Peguero, éste, tan pronto ultimó a la menor, soltó el arma y levantó los brazos, lo que aprovecharía la patrulla policial para dispararle por la espalda.
Versiones dicen lo dejaron morir. Primero fue llevado al hospital Nuestra Señora de Regla, donde dispusieron su traslado a Santo Domingo, pero lo retuvieron media hora, luego de lo cual la ambulancia se detuvo en la fortaleza de la Policía de Baní, donde lo retuvieron otros 15 minutos, lo que motivó la protesta de los familiares, a lo que agentes policiales les habrían respondido que el homicida era una lacra.
Otra version dice que lo sacaron en la ambulancia para hacer creer que falleció en el camino hacia la capital.Ya que ténía un amplio historial de robos, asaltos y otros delitos.
Versión PN.
La Policía refirió que Díaz Peguero falleció a causa de heridas de bala ocasionadas por agentes que repelieron una agresión a tiros que éste hiciera contra la menor Carina Lara, momentos en los que buscaban el arma blanca que la joven utilizó para ultimar la noche anterior a María Altagracia Ávalos. En la acción también resultó herido un oficial policial.
Los investigadores designados por la institución del orden para investigar el hecho son los generales Valentín Rosado Vicioso, Inspector de la Policía, y Héctor García Cuevas, director Central de Investigaciones Criminales.
Por Pedro Germosén
No hay comentarios:
Publicar un comentario