Una de las vigas ya comienza a ceder, la grieta es cada vez más visible y los que por allí transitan o hacen vida tienen sus propias conclusiones.
Es un elevado construido en el primer gobierno de Leonel Fernández cuando coincidencialmente estaba al frente de obras públicas el director de la Opret empresa que realiza excavaciones en las cercanías para la segunda línea del Metro. Lo que muchos en la zona culpan por el posible colapso del elevado.
Pero lo más curioso del entorno es que ya se trabaja en la base algunas de las columnas que sostiene el elevado y un cuadro muy serrado esconde lo que allí se hace. Aunque el sub director de la Opret afirmó que se realizan trabajos de mantenimiento y adecuación y descarta que la nueva obra esté afectando el lugar.
Leonel Carrasco aseguró que si hubiera algún problema grave ya el transito estuviera cancelado por el elevado. Pero los residentes y choferes de la zona afirman que lo que no se quiere es reconocer el verdadero problema.
Fuente/Telenoticias
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