En medio de múltiples movimientos de jugadores quisqueyanos durante la agencia libre, varios nombres llegan a sus nuevas escuadras con importantes misiones y mucha presión
La agencia libre en el camino a la temporada 2022 de las Grandes Ligas, inició con un número importante de peloteros buscando trabajo de cara al inicio de la campaña y aunque por meses, toda negociación tuvo que ser detenida como consecuencia del parón laboral iniciado por los propietarios de equipo, la mayoría ha logrado alcanzar acuerdos, en MLB o fuera de esta.
A la fecha, más de quince dominicanos aún se mantienen sin asegurar un nuevo contrato con alguna de las escuadras de MLB, pero la mayoría lo ha logrado. Muchos acuerdos fueron por una corta cantidad de años y tienen un costo económico “bajo”, para las franquicias. De su lado, otros llegaron por la vía del cambio a nuevas escuadras, lo que simboliza que, en términos generales, hubo mucho movimiento para los quisqueyanos durante la temporada baja.
Sin embargo, en medio del grupo resaltan tres nombres que llegaron a nuevas escuadras e inmediatamente, tienen la responsabilidad de colocar buenos números que justifiquen la decisión de cada equipo de tenerlos.
El primero de ellos es Nelson Cruz. El segundo jugador de mayor edad para la temporada 2022 de las Grandes Ligas llegó a Washington Nationals a través de un acuerdo por un año con una opción para 2023. Cruz se ha mantenido como uno de los bateadores designados más sólidos de la actualidad y su contratación, además de llevar un buen bate a la capital estadounidense, implica que deberá tomar el rol de líder a lo interno del club, debido a su experiencia.
Cruz ha tenido muy buenas temporadas en los últimos años, pero siendo realistas, no cerró el 2021 en la mejor forma. Su cambio a Tampa Bay Rays vio una importante disminución ofensiva en la que bateó para .226 con un OPS de .725 en 55 partidos. El propio “Boomstick” admitió que su principal razón para elegir a los Nationals fue la opción ofrecida para 2023 por su edad, lo que indica que está consciente de que necesita producir si quiere mantenerse en MLB por más años.
Con la marca de los 500 jonrones a tan solo 51 vuelacercas más, no queda duda de que Cruz es uno de los peloteros que no puede darse el lujo de fallar en 2022.
Otro nombre a tener en cuenta es el de Starling Marte. El jardinero fue el dominicano que más dinero logró obtener como agente libre durante la temporada baja, suscribiendo un acuerdo de cuatro años y 78 millones de dólares con New York Mets.
Marte viene de un productivo 2021 en que jugó 120 juegos, bateó para .310 y tuvo un OPS de .841. Adicionalmente, quedó líder de Grandes Ligas en bases robadas con 47, lo que muestra una gran productividad a los 32 años.
A diferencia del año pasado, donde jugó con Miami Marlins y Oakland Athletics, dos equipos donde básicamente no existía la presión de ganar, este año va a unos Mets que han movido todas las piezas posibles para llevárselo todo, lo que indica que hay altas expectativas con el trabajo del dominicano y para ello le otorgaron dicho contrato.
La principal preocupación con Marte podría ser su salud, ya que solamente ha alcanzado la cifra de 150 partidos disputados en una oportunidad, durante la campaña de 2016 y ha bajado el número de juego disputados en cada temporada desde 2018 (sin contar la de 2020 que fue recortada por la pandemia). Con varios episodios de lesiones, las luces de Nueva York se posan sobre Marte para mantenerse productivo y saludable en un año en que los Mets buscan la Serie Mundial.
Finalmente, el dominicano que llega con más presión a un nuevo equipo es Gary Sánchez, quien fue canjeado desde New York Yankees a Minnesota Twins.
Las expectativas con Sánchez en el Bronx no pudieron ser cumplidas por múltiples factores y lo que ha demostrado en los últimos años, en términos generales, de sus temporadas de 2016 y 2017, las mejores de su carrera. Sánchez no ha podido mantenerse saludable, no ha bateado como se ha esperado, aunque en 2019 superó los 30 jonrones y tampoco ha podido jugar defensa a un nivel lo suficientemente decente como para pensar que será el titular en la receptoría de los Twins.
Todas las señales apuntan a que el dominicano ocupará mayormente la posición de bateador designado en 2022, lo que le obliga a producir ofensivamente, sea como sea. Arriba de eso, se convertirá en agente libre durante el 2023, lo que pone todavía más presión sobre el joven receptor para conseguir un equipo interesado en sus servicios y que pague lo que él considera que vale en el mercado.
En términos simples, Gary Sánchez no se puede dar el lujo de cometer un error en 2022 si planea tener una agencia libre exitosa.
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