Hyundai notificó a la Administración Nacional para la Seguridad en la Carretera de Estados Unidos (Nhtsa) que la llamada a revisión afectará a 977.778 vehículos de los modelos Sonata 2011-2014 y Sonata híbrido 2011-2015.
El fabricante surcoreano señaló que la conexión del cinturón de seguridad no fue totalmente asegurado durante el montaje de los vehículos afectados, por lo que, en caso de impacto, el cinturón de seguridad se puede desprender.
Hyundai recibió en septiembre de 2016 el primer informe del defecto cuando un Sonata 2013 tuvo un impacto frontal que provocó el desprendimiento del cinturón de seguridad del pasajero delantero.
En noviembre de 2016, Hyundai recibió otro informe similar, por lo que el fabricante inició una investigación que concluyó con la decisión de llamar a revisión a los vehículos afectados.
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