Los Choferes de carros públicos que cruzan habitualmente el puente Francisco del Rosario Sánchez (o el de la 17), denunciaron que hace unas semanas está temblando más de lo normal y temen lo peor.
Afirman que en cualquier momento colapsará, debido a que precisa de una reparación “real” y no “pasarle el pañito” como se ha estado haciendo durante los últimos años. Otra de sus quejas es el deterioro que sufre su vehículo, principalmente en los amortiguadores y las gomas al caer en las juntas.
Los Choferes no son los únicos
Las familias que viven debajo del puente dicen que viven en constante peligro porque pedazos de asfalto, cemento, tornillos y planchuelas, se desprenden en todo momento del puente y caen encima de sus casas.
Afirman que no pueden dormir por el ruido que causan los vehículos pesados al pasar y que, en ocasiones, sienten que tiembla la tierra. También lamentan la pérdida de miles de galones de agua debido a una tubería rota en los laterales del puente.
“Yo sufro de la presión y salgo que me muero ahorita porque a cada rato le caen a uno peñones y piedras de allá arriba”, dijo Juliana Antilla refiriéndose a la parte inferior del puente de la 17, donde reside hace más de 15 años con sus nietos.
Hace un año, las autoridades colocaron pilotillos encima del puente, de un metro de largo por unas 15 pulgadas de altura y su peso es superior a las 300 libras, lo que aumenta el peso de la estructura.
Via diariolibre
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
-
Los enfermeros se caracterizan por la disponibilidad de ayuda hacia las personas cuando se encuentran mal de salud; sin embargo, en alguna...
-
Los jóvenes presentadores de Extremo a extremo serán la imagen de unos paquetes de bodas que un hotel de Punta Cana usará de promoción. ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario