Tres De cinco jóvenes que viajaban en el auto, mueren carbonizados esta madrugada, al chocar con un pote del extendido eléctrico en el cruce del sector (Semilla) de la autopista seis de noviembre.
Ramón Regalado Javier, de 24 años, quien salvo la vida junto a otros que esta graves, dijo que las victimas residen en la zona Oriental del Distrito Nacional, que no recordaba los nombres de sus compañero muertos.
El auto Marca Toyota Corolla placa A03-3169 al chocar con el `pote estrello el tanque de gas propano, con la cual se abastecía de combustible, que dando las víctimas atrapadas, muriendo calcinados.
Ramón Regalado Javier, en medio de un ataque de nervio por las quemaduras, dijo que las víctimas tenían residencia en los sectores de Brisas y San Isidro de la zona oriental.
En estos momentos se espera la presencia de la médica legista, doctora Bélgica Nivar y oficiales de la policía científica para levantar los cadáveres, mientras que agentes de la Policía Nacional, se encuentran el lugar, donde han formado un círculo de seguridad, donde acuden decenas de personas.
Una de las victimas supuestamente es hijo de un médico que labora en el Hospital Darío Contreras. Una ambulancia espera en el área de emergencia para trasladar a los dos sobre vivientes al Hospital Salvador Gautier, de la capital, debido a las quemaduras que presentan.
Nota de Carlos Corporán
Ramón Regalado Javier, de 24 años, quien salvo la vida junto a otros que esta graves, dijo que las victimas residen en la zona Oriental del Distrito Nacional, que no recordaba los nombres de sus compañero muertos.
El auto Marca Toyota Corolla placa A03-3169 al chocar con el `pote estrello el tanque de gas propano, con la cual se abastecía de combustible, que dando las víctimas atrapadas, muriendo calcinados.
Ramón Regalado Javier, en medio de un ataque de nervio por las quemaduras, dijo que las víctimas tenían residencia en los sectores de Brisas y San Isidro de la zona oriental.
En estos momentos se espera la presencia de la médica legista, doctora Bélgica Nivar y oficiales de la policía científica para levantar los cadáveres, mientras que agentes de la Policía Nacional, se encuentran el lugar, donde han formado un círculo de seguridad, donde acuden decenas de personas.
Una de las victimas supuestamente es hijo de un médico que labora en el Hospital Darío Contreras. Una ambulancia espera en el área de emergencia para trasladar a los dos sobre vivientes al Hospital Salvador Gautier, de la capital, debido a las quemaduras que presentan.
Nota de Carlos Corporán
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