1 de junio de 2015

Un Dominicano es el ¨Guante de Oro¨ de los Mets de Nueva York

“Tú sabes que el arroz y las habichuelas, el pollo, carne de res, un buen sancocho… Yo voy siempre por la comida latina, siempre estoy disponible cuando hay hambre para comer bien”, asegura el guardabosques dominicano de los Mets de Nueva York.

Juan Lagares siempre está bien “ready” para lo que se le ponga enfrente, ya sea un corredor queriendo desafiar a su brazo desde las praderas o un buen plato de comida dominicana.

Lagares, de 26 años de edad, se ha consolidado como uno de los hombres más confiables en las praderas del equipo del dirigente Terry Collins. Muchas de sus atrapadas aparecen en los noticieros deportivos y sus compañeros se las agradecen.

“Cuando una pelota es conectada hacia las praderas, los lanzadores no se preocupan porque ya saben que Juan la va a atrapar”, manifestó Collins recientemente ante la prensa.

Además de ‘catchar’ bolas, Lagares se ha distinguido por prevenir carreras con sus lanzamientos desde el outfield, que se basan más en la precisión y la velocidad de reacción que de un cañón como el que presumen otros jugadores.


Gracias a sus atrapadas, que muchas veces incluyen lances espectaculares, y a su habilidad para prevenir carreras, Lagares se ganó la temporada pasada el Guante de Oro en su posición, algo que sus compañeros de equipo le premiaron con unos guantes dorados de boxeo que cuelgan de su casillero.

“En realidad no me gusta el boxeo”, dijo entre risas. “Esos guantes me los regalaron porque me gané el guante de oro el año pasado. Y como broma me dieron esos guantes que son ‘golden gloves’”

Lagares, modesto, le cuesta un poco reconocer que ahora es un favorito de la afición en Flushing. Como muestra de eso está la noche del 19 de mayo en la que la tribuna se puso de pie para aplaudirle cuando salió a batear a pesar de que el equipo perdía feo ante elCardenales de San Luis.


“Ahora me reconocen un poquito más. Tuve la oportunidad de jugar mucho el año pasado y me gané un guante de oro, gracias a dios. Por eso ya la gente tiene otro conocimiento de uno. También tengo la oportunidad de jugar mucho este año. Cuando tú juegas mucho todos los días, los fanáticos y todo el mundo comienzan a saber lo que tú puedes hacer”, acotó Lagares.


Pero la gloria de la que ahora disfruta no vino fácil. Lagares firmó con Mets como parador en corto, posición en la que batalló bastante y acumuló errores que hicieron a muchos pensar que no daría para más. Sin embargo, a alguien se le ocurrió mandarlo a las praderas y el cambio fue casi instantáneo.


“En mi temprana carrera en Grandes Ligas no jugaba todos los días. Eso fue muy difícil. Después no supe cómo me cambiaron”, señaló. “Al principio esa transición fue un poquito dura, pero con el trabajo duro y la ayuda de dios pude adaptarme ahí. 

Gracias a dios tengo la habilidad que él me ha dado para jugar cualquier posición, sea en el shortstop o en el field. Me movieron a center field y ahí estoy todavía”.


Lagares tiene dos preocupaciones actualmente. Primero reconoce que su bateo no ha sido el mejor y sus números lo demuestran. En lo que va de la campaña, pega para un poco impresionante .270 con un jonrón y 13 producidas.

“Creo que estoy tratando de hacer un poco más de lo necesario. He estado swingueando bolas fuera de la zona y eso no es bueno”, apuntó. “No tuve un buen comienzo de temporada, después me arreglé. 

Es una temporada bien larga y eso siempre va a ser así, el sube y baja. Pero estoy esperando mantenerme más consistente”.

El otro asunto en su cabeza es mantener ese brazo derecho que se ha dado a respetar entre los que han intentando desafiarlo con una carrera. Y es que una lesión al finalizar la temporada anterior lo inquietó.

“Por esa lesión estaba un poquito medio preocupado, pero ahora gracias a dios me siento al 100 por ciento. Y como te dije, estoy ready para todo. Si ellos siguen corriendo yo voy a seguir tirando. Ese es mi trabajo. Algunos han aprendido y algunos no”.

Nota de Gustavo Martinez

Via eldiariodeNY

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