“Jochy Santos es mi papá, porque me abre la primera puerta que es la más difícil. Después que tú estás en el medio, recibes llamadas y ofertas de otra gente.La puerta más difícil es la primera, la de la confianza… Confiar en mi trabajo sin conocerme, eso me lo dio él, por eso mi agradecimiento eterno para don Jochy”.
Irving Alberti se confesó el primero de enero en una entrevista con Isaura Taveras, donde habló de su carrera, la que va que en ascenso tras el éxito alcanzado por sus trabajos en “Qué Chévere es Saber” y “Chévere Nights”. De hecho, podría considerar el 2014, como el año de su consolidación como presentador de TV.
Pero él sabe que nada ha sido cuestión de suerte, sino más bien, producto de su esfuerzo y sacrificios cuando se animó a dar el paso como artista 16 años atrás y, reconoce que gracias a Jochy Santos y Milagros Germán, es quien es, hoy.
“Jochy Santos es mi papá, porque me abre la primera puerta que es la más difícil. Después que tú estás en el medio, recibes llamadas y ofertas de otra gente. La puerta más difícil es la primera, la de la confianza… Confiar en mi trabajo sin conocerme, eso me lo dio él, por eso mi agradecimiento eterno para don Jochy”.
Tan a gusto se siente de pertenecer como talento a la empresa que dirige Milagros Germán, que no solo la ve a ella como su madrina en el medio, sino que nombró además, a otras mujeres que pertenecen al equipo de trabajo de “La Diva”.
“En el caso de Milagros, mi madrina son todas las mujeres de su equipo, que están pendiente a todo… Son mis madrinas en la televisión Laurita, Katu y Mariel”.
El reconocido animador y humorista también reveló en “Top 13”, que representa en su vida, la televisión, el teatro y el cine: “Que la gente me quiera, lo hace la televisión. El cine es lo que hago con más ilusión porque cruza fronteras, he viajado más con el cine que con otras de las cosas que hago. El teatro la satisfacción del trabajo en equipo”, dijo en el programa especial de año nuevo transmitido por Digital 15.
Al resaltar lo positivo de su recorrido en el medio artístico, sostiene que: “Lo que más atesoro es que no he ofendido a nadie en el camino… He dejado de ganar dinero para que alguien no se sienta mal…Tengo muchos amigos en el medio”.
Sin embargo, el tener que salir de una funeraria desde donde están velando a un ser querido, para luego ir a animar una fiesta, son de los tragos amargos que ha tenido que saborear por quedar bien con su trabajo.
Nota de Robinson Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario