Dentro de esos documentos se encuentran la cédula de identidad, la licencia de conducir y el pasaporte.
Esto significa que cuando una persona es “asaltada” o se le pierden esos “papeles”, debe disponer de por lo menos trescientos pesos para realizar esa acción que es un derecho gratuito que le asiste a cada persona.
Atracados pagamos
Un ejemplo de esto es Laura Merán (nombre falso, caso verídico), quien regresaba de comprar útiles escolares a sus hijos y se desplazaba en su vehículo junto a su esposo por la avenida Gustavo Mejía Ricart. Al llegar a la intersección con la Tiradentes, a plena luz del día, fue asaltada por un desconocido a bordo de una pasola.
El individuo cargó con la cartera de la dama, llevándose todas sus pertenencias, incluidos sus documentos personales. La mayor sorpresa se la llevaron al llegar al Palacio de la Policía, cuando le solicitaron los RD$100 pesos por cada documento perdido.
“Pero mi esposa no tenía dinero, la acababan de atracar”, dijo sorprendido el esposo de la víctima.
Explicó que tomó sus tarjetas de crédito y fue a un cajero y retiró el dinero correspondiente para el pago del documento solicitado.
Por Starlin Taveras
No hay comentarios:
Publicar un comentario