De un lado, la Guardia Nacional Bolivariana (GBN) y la Policía Nacional Bolivariana (PBN), y de otro los colectivos armados, acorralaron a los jóvenes y comenzaron a atacarlos.
Con la protección de las fuerzas de seguridad, y armados con palos, martillos, cuchillos y algunas pistolas, los encapuchados empezaron a atacar salvajemente a los estudiantes. A algunos los desnudaron, los ataron y, tras tirarlos al suelo, los patearon sin piedad.
Luego atacaron a cuatro reporteros gráficos que registraban lo que sucedía. Les robaron las cámaras fotográficas.
El saldo fue de siete estudiantes con heridas y fracturas de distinta gravedad, según informa El Nacional. Diego Landaeta y Víctor Montoya, de 22 años; José Ribas y Michael Gómez, de 19; Aaron Lobo, de 18; y José Duran son algunos de los que debieron ser internados.
El grupo de jóvenes se había reunido a la mañana en la sede de la UCV para movilizarse hasta PDVSA, en protesta contra la crisis económica y el desempleo. Pero un cordón de la PBN les impidió pasar.
Tras un breve enfrentamiento en que el que intercambiaron gases lacrimógenos y piedras, los estudiantes decidieron volver. Entonces, efectivos de la GNB fueron tras ellos.
En ese momento aparecieron motorizados, que se sumaron a la represión. Los que pudieron, corrieron a refugiarse en el campus universitario, pero allí los aguardaban grupos de encapuchados que también los atacaron.
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