El expresidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas, mayor general Rolando Rosado Mateo, defendió la conducta y el desempeño en sus funciones del excoronel Johan Liriano Sánchez, investigado con relación a la muerte a tiros del sicario Juan Cordero Febles (Copelín), cuyo cadáaver fue hallado quemado en una camioneta en un cañaveral de Yaguate, San Cristóbal, el pasado el 18 de septiembre.
Rosado Mateo afirmó que los argumentos utilizados por el Consejo Superior Policial para la destitución de LIriano Sánchez fue fruto de un libelo emitido en 2011 y que fue debidamente esclarecido por las autoridades correspondientes en su momento.
Según reporta el periódico El Día, Rosado Mateo y Johan Liriano visitaron su redacción para aclarar informaciones sobre su alegada detención para ser indagado en torno a la muerto de "Copelín", ultimado en una casa que el exoficial le habría vendido cuatro meses antes de que fuera asesinado.
Rosado Mateo y Liriano Sánchez alegaron que el Consejo Superior Policial dispuso su cancelación la pasada semana sobre la base de una información que indicaba que Liriano tenía dos fichas criminales, había sido deportado y por lavado de activos.
A continuación parte del reporte del periódico El Día sobre las declaraciones de Rosado Mateo respecto a Liriano Sánchez, exdirector de Operaciones de la DNCD:
Sobre lo de las fichas, Rosado Mateo entregó una comunicación del entonces procurador adjunto, Frank Soto, en el que ordenaba retirar las mismas del sistema de la Procuraduría porque habían sido colocadas de manera irregular y por lo tanto ordenaba una investigación para establecer cómo fueron colocadas dichas fichas sin que existieran querellas previas.
El excoronel Liriano informó que depositó ante una solicitud de revisión de la medida del Consejo, señalando que no se tomó en cuenta que lo de la supuesta ficha había sido esclarecido por la Procuraduría e indicó que la misma fue introducida a instancia de Pascual Cordero Martínes (El Chino) y Emilio Mesa Beltré (El Gringo) acusados de narcotráfico y en cuyos proceso el testigo fundamental es el propio coronel Liriano.
Sobre la acusación de que es un deportado de Estados Unidos por narcotráfico, el exoficial mostró copia de su pasaporte con múltiples entradas y salidas de territorio nortemaericano, incluyendo fechas del 2012 y 2013.
En relación al lavado de activos, señaló que la acusación es inverosímil ya que entregó a los investigadores de Asuntos Internos de la Policía el detalle de los ingresos mensuales que recibe y el origen de las propiedades suyas y de su esposa.
Explicó que como técnico en reparación de helicópteros recibe 84 mil pesos mensuales de la empresa Rep-Air; 117 mil de Aviajet, 18 mil del Instituto Dominicano de Aviación Civil como investigador de accidentes, 16 mil de la Policía Nacional y 65 mil del Banco de Reservas.
Además, afirma que recibe 39 mil pesos mensuales por el alquiler de una casa y 40 mil pesos de la lotería electrónica Leidsa.
Indicó que también recibe 25 mil pesos adicionales de la empresa Telemicro por el mantenimiento del helicóptero marca Bell 407.
Rosado Mateo manifestó que le está dando apoyo al exoficial porque éste tuvo un buen desempeño en la DNCD en lo relativo al mantenimiento del helicóptero que él usaba para las operaciones antinarcóticos, además de las funciones que les asignó en la Unidad de Reacción Rápida a Trazas Ilícitas y en otras áreas.
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