Escrito por Ramón Almanzar :
Alfonso Rodríguez recargó la escopeta y limpió su bate. “Y si este lunes los piratas vuelven a las calles salgo otra vez con todos los poderes a caerle a plomazos y a batazos; no es verdad que van a vender mi película (“Feo de noche, lindo de día), se equivocaron conmigo”.
Ya no caben dudas de que su advertencia pueda convertirse en realidad porque el jueves y el viernes se fue a Santiago “armado hasta los dientes” a perseguir y a capturar “a estas ratas que quieren jugar con mi comida”.
El “temible” Alfonso escogió a Santiago para “tomarse la justicia con sus propias manos” porque de esa ciudad fue que recibió reportes de que su película había sido pirateada.
“La copiaron con celulares y hasta se oyen las palabras en el medio, como hablan los cibaeños, con la i”, manifestó ayer Rodríguez a LISTÍN DIARIO.
Aunque él y su colega Archie López (coronel de la Dirección Nacional de Control de Drogas) fueron los protagonistas de esta historia que da para una película, el veterano cineasta aclaró que sus acciones antipiratas contó con la autorización de la Policía Nacional. El director Regional Cibao Central de la institución, Héctor García Cuevas, le asignó cuatro agentes.
Diversos comunicadores y medios han criticado la actitud de Rodríguez en contra de los piratas sin contar con un aval judicial.
La misma fiscal de Santiago, Luisa Liranzo, había advertido el viernes que los ciudadanos no se pueden tomar la justicia por cuenta propia.
“Ahora salen unos moralistas a hablar pendejadas, pero no ven los millones que hay invertidos en esta película y que por culpa de esos canallas puedo irme a la quiebra; que vengan y me lo digan en la cara...”, manifestó el presidente de la Asociación Dominicana de Productores Cinematográficos.
Luego recalcó: “Ellos no saben con el loco que están bregando; es con mis cuartos que están jugando”.
Según sus explicaciones, para comenzar a ganar un peso en “Feo de día, lindo de noche” tuvo que esperar varias semanas porque hasta ayer solo había logrado recaudar 56 millones. La mitad de lo recaudado va a los circuitos cinematográficos y la otra a los productores e inversionistas de la película.
“Yo voy a empezar a ganarme un peso a partir de este momento que ya se recaudó la inversión y no es verdad que estos hijos de (...) van a ganar más que yo, que me he fajado muchos meses”, declaró.
Rodríguez indicó que es muy difícil llevar a las salas de cine a los dominicanos. “Y si viene un carajo de estos y le ofrece por cheles mi película no van a ir porque el dinero no anda volando en este país”.
En los cines de República Dominicana solo pueden pagar 500 mil dominicanos “porque aquí hay gente que no tiene ni un peso para comer”.
De esa cantidad, señaló, 300 mil tienen que esperar cobrar a fin de mes y solo 200 mil pueden pagar por ir a ver una película. “Esto es una situación difícil y necesitamos la ayuda de las autoridades porque si no, me van a seguir teniendo de frente”.
Para que los inversionistas puedan ganar dinero en un filme una persona tiene que ir hasta dos veces al cine, aseguró.
La acción del fin de semana, ¿valdrá la pena? fue una de las preguntas de este redactor. Su respuesta: “Claro que sí, ya los piratas por lo menos la están vendiendo a escondidas y sé que no voy a erradicar la piratería, pero lo que quiero erradicar es que la vendan como semillas de cajuil en cualquier esquina, a la clara, así noooo...”.
En más de una ocasión Rodríguez encuentra en los semáforos jóvenes que le venden sus propias películas. “Me la venden en mi cara, eso es indignante”. Claro, cuando sucede eso, el pirata tiene que correr más que Félix Sánchez, porque “su corriíta le sale y si lo agarro ya tu sabes, es piña que le toca por abusador y ladrón”.
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