Al darse a conocer las posiciones ganadoras, se supo que Evelina y su bailarín, Pablo Perez, quedaron en tercer lugar. Y la pareja mostró su inconformidad frente a las cámaras dejando a Daniel Sarcos sorprendido y saliendo del estudio, revelando así el enojo por lo sucedido.
Al acercarnos para conocer lo que sentía, Evelina nos expresó: "Trabajé para no ser taburete de nadie, para ganar, de hecho puse todo mi esfuerzo".
Confirma que llamó a la producción porque se estaba comentando lo que acaba de ocurrir (el premio de Miriam Cruz).
Asegura que no le cobró un centavo a la producción, que sacó de su tiempo para esto, hizo a un lado todo, incluyendo la celebración de su cumpleaños por asumir como debía la responsabilidad que tenia con el reality, "por lo que no es justo que se me trate de esa manera".
Además entiende que aquí en nuestra República Dominicana "la televisión está envenenada, la gente con cualquier cosa que no tenga tanta esencia pierde el control, como que el gusto se ha ido un poco más allá de lo que debería ser".
Admite ser como es y no se arrepiente de decir lo que siente, "nadie me va a cambiar y tragarme lo que siento seria como envenenarme a mí misma. Siempre he sido yo con mis consecuencias y circunstancias".
Está molesta porque ella no estaba rogando que le dieran el primer lugar, ni pagando por ello, ni porque ella necesitara la suma de 200 mil pesos para hacer una obra.
Como le dijo a Carlos Salcedo, "si quiero hacer una obra no necesito hacer todo este show, lo hago porque es como dice la palabra de Dios: Lo que hace tu mano derecha que no lo sepa la izquierda".
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