"A partir de la concepción de que la raíz de bohuco no podía ser la razón de la fermentación del mabí, sino un microorganismo en ella, se inició un proceso de separación de los microorganismos que se encontraban allí, en principio se encontraron unos ocho microorganismos distintos, se hicieron pruebas y se sometieron a fermentación, hasta que se encontró el indicado. Esto se ha convertido entonces en la primera patente en el país", expuso Bernarda Castillo, directora ejecutiva del IIBI.
Castillo afirmó que el mabí, cuando se pone a fermentar el organismo, tiene el mismo sabor, textura y efervescencia del mabí tradicional. "Sólo hay que tomarlo bien frío, como un champagne", sentenció.
De acuerdo con Castillo, la patente defiende el microorganismo como un descubrimiento dominicano protegido por los próximos 20 años. "Esto quiere decir que si en Rusia, por ejemplo, deciden producir el mabí de bohuco, deben pagar al país la patente por el derecho", expuso.
El IIBI celebró el sexto aniversario de su fundación, donde fueron expuestos los logros de miles de investigaciones científicas y biotecnológicas.
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