Un tribunal dictó este viernes un año de prisión preventiva contra los seis agentes cancelados de la Policía Nacional que están acusados de matar a los esposos Elisa Muñoz y Joel Díaz, acribillados dentro de su vehículo el pasado 30 de marzo.
Cuatro de los agentes cumplirán la medida de coerción en el Centro de Corrección de La Vega y los otros dos en la cárcel de Operaciones Especiales, según informaron los representantes del Ministerio Público a la salida de la audiencia.
La corte declaró el caso complejo, lo que permite dilatar el proceso judicial, según las fuentes.
Antes de que se dictara la medida de coerción, la Corte de Apelación de San Cristóbal rechazó la recusación de la juez Sudelgi Rosario Mena, interpuesta por la defensa de uno de los acusados argumentando “hostilidad en el proceso”.
Desde antes del inicio de la audiencia, en el exterior del palacio de justicia se congregaron familiares, amigos y vecinos de las víctimas para exigir justicia por la muerte de la pareja, perteneciente a la iglesia evangélica.
La pareja de esposos, que pertenecían a una comunidad evangélica, fueron acribillados dentro de su propio vehículo en Villa Altagracia en un incidente en el que resultó ligeramente herido uno de dos hombres que los acompañaban y que iban en la parte trasera del automóvil.
El Ministerio Público acusa del hecho a al exteniente Victorino Reyes Navarro; al exsargento Domingo Perdomo Reyes, los excabos Norquis Rodríguez Jiménez y Ángel de los Santos, y los exrasos Antony Castro Pérez y Juan Samuel Ogando Solís.
El grupo fue cancelado de la Policía por orden directa del presidente Luis Abinader, quien manifestó su “horror” ante el suceso y dispuso una “reforma integral” del cuerpo del orden.
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