En un nuevo intento por consensuar una reforma al actual Código de Trabajo, que arriba este 2022 a sus 30 años, el Gobierno, junto a los sectores empresarial y sindical, vuelve a discutir una serie de propuestas ya debatidas, como revisar la cesantía, y otras nuevas, como regular el teletrabajo, que cobró fuerza durante la pandemia.
Los tres sectores están en una fase interna de revisión y actualización de las propuestas, sobre todo después de las experiencias en la pandemia.
“Nos dimos unas dos semanas para que cada sector revisara nuevamente sus propuestas”, notifica Circe Almánzar, del sector empresarial.
Sin embargo, Diario Libre conoció que, en la segunda sesión de este año del Consejo Consultivo del Trabajo, celebrada en el presente mes, los tres sectores coincidieron en su agenda incluir en estas nuevas discusiones de reforma regular el trabajo remoto y vía plataformas digitales, que tomaron auge a partir del 2020 por la pandemia del COVID-19, pues permitieron mantener las operaciones a distancia.
El Código de Trabajo en vigencia no contempla la figura del teletrabajo, situación que llevó, tanto al sector público como privado, a adoptar medidas internas. El 12 noviembre del 2020, el Ministerio de Trabajo dictó la resolución 23-2020 sobre la regulación del teletrabajo como modalidad especial laboral.
Además de este tema en común, el gobierno presentó entre sus puntos de interés las licencias de maternidad y paternidad, el seguro de desempleo y los trabajadores autónomos.
La cesantía otra vez al debate
Los empresarios han sostenido en el tiempo que el Código de Trabajo vigente está desactualizado y necesita reformarse. Sin embargo, a pesar de que sus discusiones para lograrlo llevan más de una década, esto no se ha conseguido.
En esta nueva ronda, el sector empresarial ha vuelto a presentar entre sus temas la revisión de la cesantía laboral, que consiste en el pago al trabajador de un importe que se calcula con base en su salario y tiempo laborado, a modo de auxilio durante el periodo en que estará desahuciado.
El sector empresarial ha defendido la necesidad de que la cesantía se modifique para que haya una especie de tope o mecanismo que permita que la entrega de esta compensación a un trabajador desahuciado no afecte a las finanzas de las empresas, en especial a las pequeñas y medianas.
Pero cuando se habla de cesantía se enfrentan los patronos y los trabajadores. Estos últimos mantienen su postura de que es “innegociable”.
“Me es duro decirlo, pero para nosotros es innegociable”, dice a Diario Libre Rafael - Pepe- Abreu, presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), y quien encabeza la representación de los trabajadores. “Como no lo compartimos, lo que hemos hecho es ni siquiera mencionarlo”.
“El sector gobierno no lo menciona -agrega-, pero propone un seguro de desempleo, sin decir si mantiene o no la cesantía”.
Para las discusiones de 2012, se debatía la posibilidad de sustituir el pago de la cesantía por un seguro que garantice el sueldo por un periodo determinado al empleado despedido, tipo seguro de desempleo.
La representación de la clase trabajadora prefiere abogar por que se discutan los derechos de los trabajadores domésticos y se fortalezcan la libertad sindical y la negociación colectiva.
“Estamos planteando la necesidad de extender más el tema referido a la negociación colectiva: la necesidad de que los trabajadores puedan obtener, sin el obstáculo que la ley impone, una negociación colectiva más expedita”, destaca Abreu.
“Estamos diciendo, por ejemplo, que hay que tener un porcentaje de más de 50 por ciento aquí para usted negociar colectivamente; nosotros decimos que esto, por supuesto, se modifique, y que un sindicato pueda negociar en base a sus afiliados”, explica.
En tanto que Almánzar subraya que la clase empresarial mantiene los mismos puntos de interés, relacionados con la mejora de los procesos de mediación y judiciales, la incorporación de nuevas modalidades de jornadas de trabajo y de contratos, y aspectos relacionados con terminación de los contratos de trabajo, entre otros temas que deben ser modernizados, como lo han hecho otros países.
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