En el expediente del caso de presunta corrupción administrativa denominado “Operación Coral 5G”, el Ministerio Público explica cómo funcionaba el “esquema piramidal de corrupción” que, supuestamente, se apoyaba de las nóminas del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur) y el Cuerpo de Seguridad Presidencial (Cusep).
Según las investigaciones de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA), una de las principales fuentes de recursos ilícitos, utilizada por los miembros del entramado consistía en la distracción de fondos de esas instituciones.
Para cometer las acciones delictivas desde la nóminas existía un "esquema" tipo piramidal.
Según detalla la acusación, en el caso del Cestur, el general Juan Carlos Torres Robiou aprobaba nombramiento de personas que eran colocadas en el sistema de recursos humanos por el director del Departamento de Recursos Humanos, Coronel Yehudy Blandesmil Guzmán Alcántara.
Luego el nombre de la persona era registrado en nómina por el Gerente Financiero, Coronel Rafael Núñez de Aza, y el encargado de tecnología y nómina, Mayor Raúl Alejandro Girón Jiménez.
Mientras que, en el caso del Cusep, el Mayor General Adán Benoni Cáceres Silvestre era quien aprobaba los nombramientos de personas.
No obstante, estos no pasaban por Recursos Humanos, sino que se colocaba de forma directa en nómina que era manejada por el gerente financiero, Núñez de Aza, a través del Teniente Coronel José Ramón Santos Jiménez y posteriormente por Girón Jiménez.
Reclutar militares
El esquema de corrupción, supuestamente, consistía en reclutar a militares que estuvieran asignados a otras instituciones, o que no tuvieran funciones en específico.
Luego presentaban los candidatos Girón Jiménez quien los depuraba junto a su superior, Núñez de Aza, y solicitaban la incorporación de los mismos.Tal incorporación seria aprobada por Torres Robiou, en Cestur, y por Cáceres Silvestre, en Cusep, quienes habrían ideado el formato para la distracción de los fondos público.
La investigación del Ministerio Público explica que, posteriormente, las personas que pasaban la depuración eran agregadas a las nóminas de Cusep o Cestur.
Los salarios rondaban entre 20 mil y 70 mil pesos mensuales, los cuales debían ser devuelto en su totalidad.
En algunas ocasiones los “nombrados” eran autorizados a quedarse con montos que van desde 2 mil hasta 10 mil pesos, dependiendo de la cantidad asignada.
El resto debían devolverlo a las “cabezas recolectoras”, quienes posteriormente le entregaban el dinero a Girón Jiménez y en ocasiones a Núñez de Aza.
Así funcionaba el esquema desmantelado en Coral 5G
Cada una de las cabezas recolectoras tenía su lista particular de personas para recoger mensual, las cuales le hacían los depósitos, transferencias o entregas de dinero en efectivo.
Luego de recolectar el dinero de las nóminas le hacían la entrega en efectivo o por transferencia bancaria al imputado Girón Jiménez.
Este, supuestamente, se quedaba con un porciento y hacia entrega en efectivo, de la mayor parte del dinero, a Núñez de Aza en su residencia en Colinas del Oeste.
El expediente tambien acusa al encargado de Contabilidad del Cestur, Capitán Miguel Cancú, quien pasó a ser Financiero de esa institución a la salida de Núñez de Aza.
Se establece que el promedio mensual de dinero en la dinámica de recolecta con las nóminas, soló en Cestur era de seis millones de pesos (DOP$6,000,000.00) al mes.
El imputado Núñez de Aza se encargaba de hacer entrega de una parte del dinero recolectado a:
- General Juan Carlos Torres Robiou, FARD
- Mayor General Adán Benoni Cáceres Silvestre, ERD
- Coronel Yehudy Blandesmil Guzmán Alcántara
- General Julio Camilo De los Santos Viola
- Coronel Erasmo Roger Pérez Núñez FARD
- Teniente Coronel Kelman Santana, ERD
Además, se le acusa de adquirir propiedades muebles e inmuebles en zonas rurales y urbanas para estos, de forma directa o utilizando alguna de las empresas.
Fuente CDN37
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