El cardenal Angelo Becciu, antiguo alto cargo de la Secretaría de Estado vaticana, ha defendido su “inocencia” y ha negado las acusaciones de malversación y soborno que le imputa la justicia del Vaticano tras la primera audiencia por las irregularidades en la compra de un lujoso apartamento en Londres.
“Estoy sereno y tranquilo. Tengo confianza en que los jueces sabrán ver con claridad los hechos y mi gran esperanza es cierta que reconocerán mi inocencia”, ha declarado a la salida del juicio su abogado, Fabio Viglione.
De este modo, el purpurado a quien el Papa cesó en septiembre de su cargo como prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos y le despojó de sus derechos relacionados con el Cardenalato por su supuesta implicación este caso, se ha mostrado confiado en que “la aportación de las numerosas pruebas y testimonios” lograrán demostrar “su inocencia de toda acusación”. “Siempre fui obediente al Papa”, ha señalado en su declaración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario