La inflamación aguda es el mecanismo de respuesta rápida del cuerpo que tiene como objetivo deshacerse del peligroso invasor y devolverlo a un estado de equilibrio, según explica Harvard Health.
La inflamación crónica es un proceso más gradual y sutil que puede convertirse en un estado persistente, incluso si la amenaza percibida no es realmente dañina para la salud, el sistema inmunológico del cuerpo se activa, resultando en daño a las células sanas.
El consumo de ciertas bebidas puede causar este tipo de inflamación persistente que puede convertirse en un peligro para su salud y provocar problemas graves como enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y diabetes.
Bebidas que favorecen la inflamación:
1. Bebidas azucaradas
Las bebidas azucaradas se refieren a cualquier bebida con azúcar agregada u otros edulcorantes (jarabe de maíz de alta fructosa, sacarosa, concentrados de jugo de frutas y más). Esto incluye refrescos, ponche de frutas, limonada, bebidas endulzadas en polvo, así como bebidas deportivas y energéticas.
La Escuela de Salud Pública de Harvard señala que las bebidas azucaradas son la fuente más grande de calorías y azúcar agregada en la dieta estadounidense.
Diversos estudios han relacionado el consumo de bebidas azucaradas, con la inflamación crónica. Las personas con dietas altas en azúcar tienen más marcadores inflamatorios en la sangre.
2. Alcohol
El consumo moderado de alcohol puede reducir los biomarcadores de inflamación, según publica Arthritis Foundation. Pero la palabra clave es moderada, una bebida para mujeres y máximo dos para los hombres.
El consumo no moderado de bebidas puede aumentar la inflamación en tu cuerpo.
Las personas que beben mucho pueden desarrollar problemas con las toxinas bacterianas que salen del colon hacia el cuerpo. Healthline explica que esta afección denominada “intestino permeable“, puede provocar una inflamación generalizada que daña los órganos.
El alcohol favorece la inflamación intestinal cambia la composición y función de la microbiota intestinal, lo que debilita la mucosa intestinal y comprometer la inmunidad de la mucosa de los intestinos.
El alcohol debilita el sistema inmunitario y, por consiguiente, reduce la capacidad para hacer frente a las enfermedades infecciosas.
3. Bebidas con edulcorantes artificiales
Es probable que en una intención de reducir tu consumo de calorías o reducir la inflamación optes por bebidas con edulcorantes artificiales no nutritivos, como los refrescos dietéticos.
Algunas personas sensibles a edulcorantes sintéticos como el aspartamo pueden activar su sistema inmunológico e inducir una respuesta inflamatoria, según la Arthritis Foundation.
Estudios revelan que el consumo diario de bebidas dietéticas se asoció con un 36% más de riesgo de síndrome metabólico y un 67% más de riesgo de diabetes tipo 2.
Cómo alimentarse para prevenir la inflamación
- Consume una dieta antiinflamatoria que incluya principalmente frutas, verduras, nueces, cereales integrales, pescado graso (salmón, sardinas, atún) y aceites saludables.
- Limita los alimentos con alto contenido de azúcares simples (refrescos, dulces) y carbohidratos refinados (panes, galletas, pastel).
- Limita el consumo de alcohol.
Además de controlar el peso con una dieta saludable, el ejercicio, dormir entre siete y nueve horas cada noche y reducir el estrés crónico, son claves para prevenir la inflamación.
Fuente DiarioNY
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