En un comunicado difundido este miércoles, el comandante del sector de San Juan de la Guardia Costera, Eric P. King, recordó que "barcas peligrosamente llenas con pasajeros sin salvavidas, marineros sin apenas experiencia sobre aguas peligrosas son una amenaza seria para la vida de los migrantes que intentan cruzar el Canal de Mona".
En este sentido, agregó que en ambas interdicciones, la rápida respuesta y coordinación entre las unidades de la Guardia Costera implicadas en las detenciones, el grupo interagencial de fronteras del Caribe y la Marina dominicana han logrado prevenir una tragedia potencial y una rápida repatriación de los 64 emigrantes".
Las detenciones se produjeron este martes y el pasado viernes.
El grupo de ayer, de 46 migrantes, fue detenido a 24 millas náuticas (unos 44 kilómetros) de Miches, en el noreste de la República Dominicana, y avistado por la Guardia Costera.
A bordo de la barca viajaban 37 hombres y 9 mujeres dominicanas.
La interceptación de la otra nave se registró el pasado viernes y en la citada embarcación viajaban 18 personas -17 hombres y 1 mujer- que fueron halladas navegando a unas 8 millas náuticas (unos 14 kilómetros) al suroeste de Rincón (oeste de Puerto Rico).
La Guardia Costera remarcó que tras ser subidos a sus barcos, los emigrantes recibieron comida, agua, refugio y atención médica básica.
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