Ayer, un empleado de la compañía Paceo se ocupaba de romper a mandarriazos parte de una pared de la sala del apartamento 104 –B, para solucionar una avería en una tubería que provocó una obstrucción en el drenaje del baño de la señora Altagracia Taveras.
Mientras, Eladio Báez se mantenía a la espera de una brigada. “El agua me sube por el lavamanos y por el desagüe de la lavadora. Ya tengo un mes con este problema”, se quejó.
De 15 apartamentos que visitaron reporteros de elCaribe, 10 presentaban problemas de filtraciones y en el drenaje. “Cuando está lloviendo, el agua se filtra por el techo y baja por las paredes de mi habitación”, dijo Dariana Galván, quien vive en un cuarto piso.
El agua también sube por el desagüe del área de lavado del apartamento de Alison Encarnación.
Aunque el problema de filtración le fue resuelto recientemente, Isabel Ramírez asegura que llevaba un mes en esa situación. Se observó, además, que en cinco de los apartamentos visitados las llaves de bañeras y fregaderos tenían escapes.
Aunque el problema de filtración le fue resuelto recientemente, Isabel Ramírez asegura que llevaba un mes en esa situación. Se observó, además, que en cinco de los apartamentos visitados las llaves de bañeras y fregaderos tenían escapes.
Según indicó el encargado de programación y mudanza de 1,400 familias de La Barquita de Santo Domingo Este, Nelson Camilo, hasta el pasado martes habían trasladado a 520 familias hacia el proyecto asentado en La Javilla de Sabana Perdida.
Fuente elcaribe
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