Con este grupo suman 2 mil 161 la cantidad de exconvictos criollos que el Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos repatria en el transcurso del presente año. Sin embargo, la cifra de repatriados este año es menor a la enviada en igual periodo de 2013.
Un avión fletado por las autoridades estadounidenses trajo a los 58 nacionales escoltados por cinco agentes federales y en el aeropuerto de Las Américas fueron entregados a funcionarios de Migración y a oficiales de los diferentes organismos policiales y militares.
En dos autobuses fueron trasladados hasta la sede central de la Dirección General de Migración, organismo que se encarga de ficharlos, depurarlos y luego enviarlos a otras instancias oficiales, entre ellas la Policía Nacional, DNCD y Departamento de Investigaciones (DNI).
Informes obtenidos en el aeropuerto de Las Américas indican que 33 de los 58 criollos cumplieron condena por tráfico de drogas y los demás por asaltos, asesinatos y otros delitos, en cárceles de Nueva York, Boston, Miami, Los Angeles, California y otros lugares estadounidenses.
Algunos cumplieron condenas entre los seis, ocho, diez y hasta quince años, la mayoría de ellos por asesinatos y tráfico de estupefacientes en diversos lugares estadounidenses, especialmente, Nueva York, Boston y Miami.
Un avión fletado por las autoridades estadounidenses trajo a los 58 nacionales escoltados por cinco agentes federales y en el aeropuerto de Las Américas fueron entregados a funcionarios de Migración y a oficiales de los diferentes organismos policiales y militares.
En dos autobuses fueron trasladados hasta la sede central de la Dirección General de Migración, organismo que se encarga de ficharlos, depurarlos y luego enviarlos a otras instancias oficiales, entre ellas la Policía Nacional, DNCD y Departamento de Investigaciones (DNI).
Informes obtenidos en el aeropuerto de Las Américas indican que 33 de los 58 criollos cumplieron condena por tráfico de drogas y los demás por asaltos, asesinatos y otros delitos, en cárceles de Nueva York, Boston, Miami, Los Angeles, California y otros lugares estadounidenses.
Algunos cumplieron condenas entre los seis, ocho, diez y hasta quince años, la mayoría de ellos por asesinatos y tráfico de estupefacientes en diversos lugares estadounidenses, especialmente, Nueva York, Boston y Miami.
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