Dominicana demanda policía de Nueva York por acusación de complicidad en estafa a universidad

Nueva York.- Una sargento dominicana del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD), está demandando a la uniformada por haberla acusado de complicidad en una estafa de $6 millones de dólares, de la que su novio el ingeniero informático George Castro (también dominicano) fue declarado culpable y condenado a 21 años en la cárcel.

La oficial Denise Díaz, se queja de que también el NYPD la ha tratado “pobremente” durante las investigaciones en las que ella ha sido un blanco. 

Los fiscales la acusaron de haber recibido $130.000 dólares de los $6 millones estafados por Castro a la Universidad de Columbia y al Hospital Presbiteriano, que es una dependencia de ese centro educativo. 

Según la fiscalía, a la sargento se le ofreció un acuerdo en el que ella se comprometió a devolver en cuotas el monto que recibió de su marido, pero no cumplió el pacto. La sargento, de 41 años de edad fue sometida a interrogatorio en noviembre del 2010., después que Castro fue detenido en relación a la estafa. 

En la demanda, la oficial sostiene que sus compañeros la trataron igual que a los presos que están retenidos contra su voluntad en un cuartel, acompañándola al baño y vigilando la puerta. Le quitaron el arma y la placa y la reasignaron a un servicio modificado. 

“Es inaudito, porque ella nunca ha sido acusada de ningún crimen”, señaló su abogado Ricardo Aguirre, aunque según los fiscales, la situación judicial de Díaz, quien busca una compensación no especificada en la demanda, “no está clara”. 

Un portavoz de la Oficina Legal de la ciudad, dijo que se revisará el reclamo de la sargento. En julio de este año, la oficina del fiscal del distrito de Manhattan, sometió una intención de rescatar los $130.000 dólares que supuestamente fueron a parar a manos de Díaz, producto de la millonaria estafa, después que ella se negó alegadamente a devolver el dinero. 

Castro, de 50 años de edad y padre de dos de los hijos de Díaz, acceso al sistema informático de la universidad y el hospital para desviar los $6 millones su cuenta personal y a las de dos cómplices que también fueron encausados. 

Fue condenado por cargos de robo en mayor cuantía y lavado de dinero.