En un comunicado, los guardacostas estadounidenses de la división de San Juan detallaron que la búsqueda comenzó cuando el pasado viernes por la noche recibieron varias llamadas de familiares preocupados por el destino de quienes viajaban en una embarcación que había zarpado la semana anterior de República Dominicana.
Estaba previsto que la barca llegara el domingo 1 de diciembre a Cabo Rojo, en Puerto Rico, pero el viernes 6 de diciembre, aún no se sabía nada de ella y hasta el momento no se ha tenido noticia alguna del paradero de sus pasajeros.
"Aunque quizás nunca vayamos a saber del destino de estas personas o lo que les sucedió, nuestros pensamientos y oraciones están con sus familias y seres queridos en este difícil momento", dijo hoy el capitán Drew Pearson, comandante del Sector San Juan de la Guardia Costera.
Añadió en un comunicado que "aunque nuestra búsqueda ha terminado, vamos a seguir trabajando con nuestros socios para asegurar que aquellos que ponen en peligro tantas vidas, tratando de hacer un peligroso viaje a través del Canal de Mona en embarcaciones no aptas para navegar y extremadamente sobrecargadas, rindan cuentas de sus actos".
Los equipos de búsqueda y rescate de la Guardia Costera buscaron durante cuatro días por mar y aire una superficie que abarcó cerca de 39.000 millas náuticas cuadradas (unos 100.000 kilómetros cuadrados) dentro de un área que comprendía las aguas de República Dominicana y Puerto Rico.
El cuerpo de vigilancia busca la colaboración ciudadana por si alguien tiene información de lo ocurrido y pide que, en ese caso, se ponga en contacto con los oficinas de Puerto Rico a través del número de teléfono +1 787 729 2041.
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