Omar Durán, un trabajador dominicano de mantenimiento fue arrestado ayer jueves y acusado de haber coloca al menos tres bombas falsas en distintos sectores de Staten Island, celoso con su ex mujer y frustrado porque no podía ver a su hija de 10 años por orden de la Corte de Familia.
Los investigadores dijeron que Durán, un residente legal de Estados Unidos, puso al menos tres bombas fue acusado formalmente en la Corte Criminal de Stapleton donde se declaró "no culpable" de los cargos.
Los fiscales sostienen que Durán colocó bombas falsas y artefactos explosivos operables en distintos sitios de Staten Island, entre el 2 y el 14 de septiembre de este año.
Los investigadores dijeron que dos de los explosivos falsos, "bien pudieron haber explotado". El juez le impuso una fianza de $500.000 dólares en bonos o $350.000 en efectivo.
Durán, respondía a las preguntas en el tribunal a través de un intérprete que traducía sus respuestas del español al inglés. El magistrado Charles Troia le ordenó regresar a la corte el próximo 24 de este mes para dar seguimiento al caso.
De ser hallado culpable, Durán podría ser deportado a la República Dominicana.
Reside en la cuadra 200 de la calle Summer Place en el sector New Brighton de Staten. Island.
El Fiscal Adjunto Biju Koshy dijo en la sala de justicia que Durán dejaba manuscritos junto a las bombas.
"El señor Durán plantó las bombas, porque quería que el novio de su ex mujer y el novia de otra que vive en el mismo edificio estuvieran fuera de la casa", añadió el fiscal.
"Estaba celoso de este hombre por haberse casado con una de las personas que figuran en la orden de protección", explicó el fiscal.
Uno de los hombres involucrados en el affaire fue identificado como Juan Cruz. "El señor Cruz fue una figura paterna para la hija de esa mujer y Durán, estaba celoso de ese hecho", sostuvo el fiscal.
"El señor Durán, quería ser la figura del padre", dijo el funcionario judicial.
Antes de plantar las bombas, Durán, según el expediente, hizo varias llamadas a funcionarios federales de seguridad nacional diciéndoles que Cruz había cometido delitos en un intento fallido para lo deportaran.
Las autoridades federales rastrearon las llamadas de Durán. Uno de los vecinos de Cruz, Miguel Roque, recibió la visita de la policía y Roque les describió a Cruz como un buen hombre. Cruz fue detenido e interrogado pero fue liberado el 12 de septiembre.
Fuentes de la investigación dijeron que Cruz se casó con una vecina de Durán el pasado sábado. Las bombas puestas por Durán causaron alarma entre los residentes de Staten Island y provocaron una respuesta masiva de la policía que buscó los dispositivos.
Los fiscales dijeron que la primera bomba, Durán la puso el 2 de septiembre en Port Richmond, la segunda el 12 de septiembre en la avenida Randall Manor de Brentwood, donde el acusado dejó u olvidó una mochila que contenía una botella de una libra de gas propano, un aerosol vacío, una lata de sopa de grasa, una grasa desconocida envuelta en papel de envolver forrado con una toalla la que estaba adherida con una cinta pegante, una botella de agua Perrier llena de gasolina, un recipiente plástico con tornillos para yeso en cinta plástica, un recipiente del tamaño de medio litro con variedad de frutas secas, pernos y tornillos envueltos en cinta plástica, un encendedor azul de la marca "Scripto" y un cable CAT5 en espiral que cuando se usan juntos, son inflamables y se consideran explosivos operables.
El 14 de septiembre, Durán, supuestamente dejó un bulto de computadora en la carretera Duncan Road en Grymes Hill, conteniendo gas propano, una batería, una cinta adhesiva ligera, cableado, una lata con tornillos y gasolina, que cuando se usan juntos hacen el mismo efecto de los anteriores como explosivos operables.
Durán les dijo a los investigadores que había visto hacer ese mismo tipo de bombas en la televisión y películas.
Pero aclaró que nunca tuvo la intención de hacer estallar las bombas. Esos componentes, hubieran estallado si hubiesen sido encendidos manualmente.
Durán se enfrenta a múltiples cargos por posesión criminal de un arma en primero y tercer grado, colocación de una bomba falsa y temeridad en primer grado.
La acusación más grave en su contra, posesión criminal de un arma le conllevaría una posible pena de hasta 25 años en la cárcel, si declarado culpable.
Nota de Miguel Cruz Tejada
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