En una escena llena de dramatismo, miembros de organismos de socorro simularon una emergencia real. En la misma, el tren principal derecho de un avión con 64 pasajeros a abordo colapsa, provocando un fallo en las turbinas. La aeronave se incendia y sus pasajeros y tripulantes salen a prisa del fuselaje.
Minutos después llegan a la zona del siniestro unidades de bomberos de la terminal y otros vehículos de emergencias para sofocar el fuego y brindar atenciones a las víctimas.
Con este simulacro de accidente de aviación Aerodom pone a prueba los procedimientos establecidos para ser aplicados en una emergencia real.
La prioridad de este personal entrenado es salvar vidas, indicaron los organizadores de este ejercicio. En segundo plano, se buscó restablecer las operaciones en el aeropuerto.
En este tipo de ejercicios se habilitan también salas dentro de la terminal para atender heridos, familiares y prensa, todo como si fuera real.
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