Una mujer de Arkansas que cobró un premio por un millón de dólares podría tener que entregar el dinero a quien arrojó el billete ganador a la basura, según determinó un juez.
El juez decidió que Sharon Duncan tenía derecho al dinero del premio, no Sharon Jones, quien cobró el dinero y asegura ya se gastó una parte, en un camión nuevo y regalos en efectivo para sus hijos.
El abogado de Jones, James Simpson, dijo que Duncan tiró el boleto a la basura después de que leyó que no estaba premiado. El abogado argumentó que no debería permitirse a la gente tirar cosas a la basura y luego decir "oh, quiero destirarlo (sic)''.
"Se convirtió en basura cuando alguien se deshizo de él", agregó. Sin embargo, el juez Thomas Hughes del condado de White, dijo que Duncan al tirar el boleto, no abandonó su derecho a reclamar el millón de dólares.
Jones testificó que recogió del bote de basura un puñado de boletos desechados —como lo había hecho muchas veces antes. La gerente del local, Lisa Petriches, fue quien entablo la demanda, alegando que la basura era suya.
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