Jessica Vega, una joven madre dominicana de 25 años de edad y de origen dominicano, fingió estar enferma de Leucemia (un cáncer terminal en la sangre), usando el padecimiento para recaudar millares de dólares que gastó en una pomposa boda, que era su sueño.
Vega, que residía en el condado Montgomery, al Norte de la ciudad, fue arrestada el pasado 3 de abril en Virginia, donde se marchó luego de celebrar el matrimonio. Utilizó las redes sociales, correos electrónicos y otros medios para pedir dinero al público, fingiendo que se estaba “muriendo” y que no tenía recursos para pagar sus gastos médicos.
El caso cobró fuerza cuando la historia fue publicada en el diario Times Herald Record de la ciudad de Middletown. Ayer jueves, fue presentada en la corte criminal del condado Orange, donde se declaró culpable de estafa.
Los fiscales dicen que logró reunir $13.368 dólares, dinero que tendrá que pagar a sus víctimas como restitución y permanecerá en la cárcel hasta su regreso al tribunal el próximo 15 de mayo.
Los donantes le regalaron los anillos, un vestido de novia bordado y un viaje a Aruba para su luna de miel, además de que le regalaron la comida, el vino y el arreglo de belleza en uno de los salones más caros del condado.
El esposo, tras ser cuestionado por los medios, decidió divorciarse un año más tarde. Ella le entregó al periódico una carta falsa de un médico, tratando de reforzar su historia en los medios.
Regresó con su marido y procrearon un segundo hijo. La oferta de los fiscales es la de que si devuelve el dinero, podrá ser condenada a tiempo cumplido. Su abogado Jeremy Flaherty, dijo que de alguna manera, el marido de Jessica tendría que ayudar con el pago.
El jurista dijo que Vega está arrepentida por haber mentido acerca del falso cáncer en la sangre y espera que las personas que le mostraron su bondad, no queden desilusionados para que sigan ayudando a otros con verdaderas necesidades en el futuro.
Autor: Miguel Cruz Tejada
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