El Padre :
¡Dios mío, pero ¿que es esto? ¡No puedo creer eso de mi hijo. No lo puedo creer. Yo que lo he criado tan responsable!”.
Así exclamó ayer consternado David Concepción, cuando supo que su hijo, el estudiante puertorriqueño Kelvis Concepción Bonilla, de 23 años, fue detenido en España el viernes por intentar introducir narcóticos en unas cápsulas de plástico que tenía alojadas en los intestinos.
Ismael Cintrón, jefe en Puerto Rico de la Interpol, narró la reacción del señor Concepción y dijo que surgió mientras le daba la noticia por medio de una llamada a la República Dominicana.
El atribulado padre y su esposa, Cecilia Bonilla, se habían trasladado a ese país esta semana desde Aguada para reportar la desaparición de su vástago.
Concepción Bonilla había desaparecido desde el lunes de la Universidad Iberoamericana (UNIBE) de Santo Domingo, donde cursaba su segundo año de medicina. Sorpresivamente, el joven estudiante reapareció el viernes en el aeropuerto de Madrid, donde fue intervenido por agentes del Grupo de Estupefacientes de España, cuando intentó introducir a ese país cápsulas de plástico que contienen una sustancia que se presume es cocaína, según dijo Cintrón.
“Ellos están en shock. No lo pueden creer. Parece que son personas cristianas que se han esforzado mucho para que su hijo estudie medicina”, dijo Cintrón ayer en la tarde, cuando ya la noticia había trascendido en las páginas de prensa en internet en la República Dominicana y en Puerto Rico.
“Yo le dije el viernes que su hijo estaba detenido en Madrid y que aún no se sabía el motivo. Yo sabía el motivo del arresto, pero como vi a esos padres tan preocupados no quise darles la noticia para que durmieran tranquilos y esperé para informárselos hoy (ayer) en la mañana” relató Cintrón.
El trato compasivo de Cintrón no tuvo mucho efecto porque antes de la media noche del viernes la oficina de la Interpol de Santo Domingo le informó a los padres los motivos reales del arresto. “Cuando hablé con ellos esta mañana (ayer). Me dijeron que no pudieron dormir porque se los informó la Interpol de allá (Santo Domingo). Ya sabían la noticia en la mañana y todavía estaban aturdidos. Ellos no entienden nada porque el muchacho tenía notas excelentes”, observó Cintrón.
El Nuevo Día intentó sin éxito comunicarse por teléfono con los padres del joven Concepción Bonilla y con su tío, José Bonilla.
El jefe de la Interpol indicó que ayer estuvo en comunicación con la oficina de la Interpol en España donde le indicaron que están esperando que el joven Concepción Bonilla expulse de forma natural un pequeño grupo de cápsulas de plástico que aún conserva en sus intestinos.
Cintrón informó que, tan pronto fue arrestado, el estudiante fue interrogado en múltiples ocasiones. Las autoridades españolas intentaban descubrir a los autores intelectuales de su fallido intento de servir de “mula”, como se les conoce a las personas que usan los narcotraficantes para introducir drogas ilegales a un determinado país.
Fuente/El Nuevo dia
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