El hecho ocurrió en Weatherford, Texas, luego de que el funcionario se desplomara frente a ellos tras un aparente ataque al corazón.
Los hombres que permanecían con sus manos atadas, decidieron forzar la puerta y gritar para solicitar ayuda.
"Nos preocupaba que llegaran con sus armas y nos apuntaran", señaló uno de los internos al canal ABC.
Afortunadamente la seguridad del recinto se percató de lo que estaba ocurriendo y sólo dedicaron sus esfuerzos en ayudar al guardia caído, quien fue atendido por los paramédicos y ya se encuentra en buen estado de salud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario