Los investigadores dijeron que el accidente se produjo cuando el conductor de la unidad de la policía perdió el control y se estrelló contra la pared frontal de la vivienda, propiedad de la inmigrante criolla, reportó el periódico Sun Sentinel.
La policía dijo que otra mujer, Marcia Vandervis y su hijo de 2 años, salvaron milagrosamente sus vidas por haber reaccionado a tiempo al estruendoso impacto que vecinos compararon con la explosión de una bomba de alto poder.
También, la abuela de Teresa, Teresa Alvarado de 94 años de edad y una sobrina de la dueña de la casa, Vanessa Alvarado, se encontraban en la estructura en el momento del accidente.
El impacto fue tan fuerte que derrumbó parte de las paredes, averiando parte de los muebles y el piso, además de impulsar piezas de blocks de hormigón y destruir un valioso cuadro floral y una mesa de cristal que estaba en la sala.
Una densa nube de polvo, se mezcló con los escombros de la vivienda semi destruida. El policía que manejaba el patrullero fue ayudado por las mujeres y salió con las manos sobre la cabeza, mientras muy cerca, una mujer que abordaba un BMW plateado gritaba histérica ya que la puerta del lado de la conductora, había sido también averiada.
El oficial, según el informe de los investigadores, chocó con el BMW, antes de estrellarse contra la casa de la dominicana Alvarado.
El teniente Osvaldo Pérez, de la policía de Hollywood dijo que el oficial accidentado estaba en camino a una escena desde la que se había reportado un robo, cerca de la carretera interestatal 95 y la calle Johnson.
Fue un vecino de Alvarado, quien corrió al carro patrulla accidentado, tomó el radio de la unidad y se comunicó con el cuartel, informando lo ocurrido. Los testigos dijeron que creyeron que el oficial accidentado había muerto en el choque y que fue un milagro que se pudiera salvar.
Los muebles que quedaron sin dañarse de la casa de Alvarado, fueron acomodados en el patio trasero de la vivienda.
El policía que manejaba el patrullero fue ingresado en el Hospital Regional, curado de lesiones leves y despachado. Marcia también fue ingresada en el mismo nosocomio y despachada poco después.
Vandervis dijo que ella y la dominicana que conversan todas las noches, pudieron haber sido víctimas de algo peor, porque acostumbran a sentarse en el sofá de la sala semi destruida.
Siete personas se encontraban en la casa en el momento del accidente y la abuela de Alvarado, estaba en la cocina. “Esa explosión, me acordó las bombas que se escuchaban durante la revolución de 1965 en Santo Domingo”, dijo la anciana.
La sobrina de Alvarado, también estaba de visita en la residencia y dijo que entró en shock al ver el carro de la policía parcialmente dentro de la casa.
“Mi mente todavía da vueltas, preguntándome ¿qué hubiera pasado si los niños hubiesen estado jugando en la sala?” Añadió que la casa de su tía, es el lugar donde la familia se reúne, “pero así es como quien conoce a Dios es protegido”, dijo la joven.
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